Las altas expectativas de los propietarios, la puesta en marcha de la nueva Ley Hipotecaria y el escenario político actual están provocando una caída en las ventas en todo 2019.


El mercado inmobiliario actual en poco se parece al que existía hace una década, puesto que las promociones de vivienda nueva están aproximadamente ocho veces por debajo de los niveles de construcción en el “boom”, se firman un 70% menos hipotecas y se cierran un 30% de las transacciones de aquella época.

No obstante, el precio de la vivienda está muy cerca de los máximos alcanzados en 2007, aunque siempre con matices y según zonas.

Como indican los datos del INE y que se corrobora con el mercado actual y el día a día, el número de operaciones cerradas baja cada mes. Todos los indicadores económicos ya lo estaban advirtiendo desde finales de 2018 y los datos les dan la razón. Por ejemplo, en el primer trimestre de 2019 se han vendido un 12,13% menos de viviendas de segunda mano que en el mismo trimestre de 2018. Y esta tendencia sigue en aumento y consolidándose.

«El mercado inmobiliario ha entrado en una fase de estabilización»

Evolución de venta de vivienda en Valencia entre los año 2016 y 2019 según el INE
Evolución de ventas de viviendas en España durante los primeros trimestres desde 2008 hasta 2019

Y, sin embargo, el precio por m2 sigue subiendo en los barrios con más demanda. Si bien es cierto, que cada vez con menos fuerza, según se comprueba en los datos proporcionados por IDEALISTA para la ciudad de Valencia y sus tres barrios con precios más altos.

Situación por barrios: L'Eixample, Ciutat Vella y El Pla del Real en la ciudad de Valencia con respecto a situación del precio por m² de vivienda

La conclusión de estos datos es el mercado ha entrado –hace tiempo– en una fase de estabilización, con subidas de precios mucho más contenidas. Todo parece indicar que el mercado inmobiliario muestra síntomas de agotamiento (el crecimiento interanual en Valencia ya es negativo).

«El propietario que quiera vender ahora a buen precio debe hacerlo lo antes posible»

Todo ello es debido a varias causas:

  • Incremento continuo de los precios de la vivienda desde 2015, creciendo vertiginosamente en algunas ciudades.
  • La entrada en vigor de la nueva ley hipotecaria ha aumentado el precio de las hipotecas, estableciendo, a su vez, nuevos criterios de evaluación de riesgo de los deudores.
  • Inestabilidad política provocada por un largo ciclo electoral que hace que los compradores se encuentren indecisos ante nuevos acontecimientos.

Por tanto, el propietario que quiera vender todavía a buen precio debe hacerlo cuanto antes, si es posible en el último trimestre del año. A medida que avancen los meses, los precios (que ya se han estabilizado), comenzarán a bajar y los compradores volverán a tener la sartén por el mango.